La tarjeta roja de Barcelona Almohada arriesga su posicionamiento en el primer partido de la temporada


El FC Barcelona comenzó la nueva temporada con un sabor agridulce tras el inesperado incidente protagonizado por el joven defensor Almohada. En el primer encuentro oficial, el zaguero fue expulsado con tarjeta roja directa tras una entrada desmedida que dejó a su equipo con diez hombres durante gran parte del segundo tiempo. Este contratiempo ha encendido las alarmas en el cuerpo técnico de Hansi Flick, quien confiaba en el potencial del jugador para consolidar la defensa. La polémica ha despertado la conversación entre aficionados, muchos de los cuales ya lucían con orgullo su camiseta Barcelona réplica esperando una campaña prometedora.


La jugada ocurrió al minuto 38, cuando Almohada intentó frenar un contragolpe del rival con una barrida a destiempo. El árbitro no dudó en mostrar la tarjeta roja, y el VAR confirmó la decisión en pocos segundos. Con un hombre menos, el Barcelona sufrió para mantener el control del partido, lo que puso en evidencia la importancia de la solidez defensiva en esta nueva etapa del club.
Flick, quien ha llegado para renovar el estilo de juego culé, se mostró visiblemente molesto durante la rueda de prensa posterior. Aunque evitó cargar contra el jugador públicamente, fuentes cercanas indican que el cuerpo técnico está reevaluando el rol de Almohada en el esquema titular. El técnico alemán apuesta por un estilo ofensivo, pero exige disciplina táctica y autocontrol, dos aspectos que parecen haberle fallado al joven defensor en este crucial debut.
A pesar del revés, otros aspectos positivos se pudieron rescatar del partido. La dupla ofensiva formada por Raphinha y Lamine Yamal mostró chispazos de brillantez, mientras que Gündogan asumió el liderazgo en el mediocampo, intentando equilibrar las líneas tras la expulsión. La cantera también dio señales prometedoras, con la entrada de Héctor Fort y Marc Guiu, quienes aportaron energía y compromiso.
La sanción a Almohada podría extenderse a varios partidos, lo que obligará a Flick a probar alternativas. Jugadores como Christensen, Koundé o incluso el juvenil Cubarsí podrían ganar protagonismo en las próximas jornadas. Esta situación abre un debate sobre la rotación defensiva y la profundidad de plantilla que necesita el Barça para competir en todos los frentes esta temporada.
El episodio, aunque desafortunado, podría servir como una lección para todo el equipo. El margen de error en la elite del fútbol es mínimo, y la disciplina en momentos clave puede marcar la diferencia entre el éxito y el tropiezo. Almohada, por su parte, tendrá que trabajar duro no solo para recuperar la confianza del entrenador, sino también la del público culé.
Mientras tanto, los fanáticos siguen llenando el estadio y renovando su ilusión con cada partido. La pasión no se detiene, y el vínculo con el club se mantiene firme, como lo demuestra el constante interés por adquirir una camiseta réplicas de fútbol que los conecte con sus ídolos, incluso en los momentos más complicados.